La Policía apresó a un hombre para investigarlo con
relación a la desaparición del niño Rafael Eduardo Jourdain el 14 de
este mes en Invivienda, Santo Domingo Este.
Una fuente de la Policía dijo que los investigadores tienen
“serios indicios” que incriminan a esa persona, cuyo nombre fue omitido
para no entorpecer las investigaciones.
La fuente afirmó que las investigaciones del sonado caso fueron
asumidas por el jefe de la Policía, mayor general José Armando Polanco
Gómez, con el objetivo de imprimir mayor agilidad.
En esas funciones, la presente semana, Polanco Gómez visitó la
vivienda de la madre del menor, Miguelina Jourdain, ubicada en el
edificio 3, manzana 46-98 de Invivienda.
Rafael Eduardo, de cuatro años de edad, desapareció del estacionamiento de su vivienda el sabado 14.
Desde entonces, la familia del menor y un equipo del
departamento de Investigaciones Criminales de la Policía, iniciaron
su búsqueda.
Tres días después de la desaparición de Rafael Eduardo apareció el
cadáver de un niño de la misma edad en las márgenes del río Isabela.
En un principio su madre reconoce que el cadáver tiene
características similares a la del menor desaparecido, pero no tiene la
seguridad de que se trata de su vástago.
También, el Instituto de Patología Forense y la Policía afirman que hay algunas coincidencias.
Para despejar las dudas, las autoridades dispusieron realizar al
cadáver una prueba de Ácido Dexorribonucleico (ADN) para definir la
identidad del mismo.
Mientras, la familia del menor y la sociedad en general esperan ansiosos por el esclarecimiento del sonado caso.
Exige respeto
Miguelina Jourdain, madre del niño, exigió este jueves respeto y
consideración y amenazó con someter a la Justicia a las personas que se
presenten a su casa a molestarla a ella y a sus hijas, tratando de
responsabilizarla del hecho. Afirmó que esas personas desconocen su
vida, su comportamiento como ciudadana y con su familia y que, como
consecuencia, carecen de elementos para juzgarla.
UN APUNTE
Madre exige respeto
Miguelina Jourdain, madre del niño de cuatro años de edad que
desapareció el 14 de este mes en Invivienda, exigió este jueves respeto y
consideración y amenazó con someter a la Justicia a las personas que se
presenten a su casa a molestarla a ella y a sus hijas, tratando de
responsabilizarla del hecho.
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