Unas seis dominicanas que trabajan en cabarets de Chipre sometieron a sus empleadores a la justicia en lo que va del año, luego de confesar que además de “bailar y servir tragos” se las obligaba a tener relaciones sexuales con los clientes. Las mujeres, de entre 21 y 36 años de edad, tienen procesos en curso con la justicia de Chipre y han sido llamadas a estrado para presentar testimonio de sus vivencias.
Unas seis dominicanas que trabajan en cabarets de Chipre sometieron a sus empleadores a la justicia en lo que va del año, luego de confesar que además de “bailar y servir tragos” se las obligaba a tener relaciones sexuales con los clientes.
Las mujeres, de entre 21 y 36 años de edad, tienen procesos en curso con la justicia de Chipre, tras someter a sus empleadores, y han sido llamadas a estrado para presentar testimonio de sus vivencias, como reseñan diarios de ese país.
Las mujeres dijeron que fueron reclutadas en el país por una mujer de nombre “Maritza”, quien prometió que trabajarían de meseras en centros de diversión.
Contaron que estando en Chipre se les informó que además debían sostener relaciones sexuales con clientes y que, de lo contrario, no cobrarían sus salarios.
Los supuestos proxenetas tienen acusaciones de mujeres de otros países, lo que indica que pudiera tratarse de una red de tráfico de personas.
Testimonios. El periódico Cyprus Mail reseña en una edición de febrero pasado el testimonio de una dominicana de 21 años que fue forzada a sostener encuentros sexuales con varios hombres en el cabaret donde trabajaba de bailarina.
El reportaje relata que la mujer viajó a la isla de Chipre para trabajar, “servir tragos y bailar”, y que al llegar se encontró con que sus funciones incluían sostener relaciones sexuales con los clientes. Si no lo hacía, confesó la mujer en corte, no le pagaban su salario.
La dominicana dijo que solicitó a sus empleadores no forzarla a tener sexo porque aún era virgen.
Sin embargo se encontró con que su virginidad significaba más dinero para el negocio, ya que podía ser vendida a un mayor precio.
Cuatro hombres fueron acusados de ser proxenetas y beneficiarse económicamente de la prostitución y tráfico de personas para explotación sexual.
Los hombres, de 48, 24, 36 y 43 años trabajaban en el cabaret Sodoma, en Lakatamia, Nicosia, donde trabajaba la joven, el cual finalmente fue clausurado.
La dominicana dijo que se retiró del cabaret cuando sus empleadores intentaron venderla por sexo en tres ocasiones.
En las tres veces ella rehusó, pero la tercera vez fue golpeada por el cliente y sexualmente abusada.
“Comencé a gritar y a llorar. El me golpeó y me dijo que no llorara…Yo vomité y le rogué que me regresara”, relató en audiencia. Los abusos contra la muchacha ocurrieron en el 2008.
Otra mujer confesó en corte que mintió a los investigadores porque al inicio declaró que había sido llevaba a Chipre por una amiga de nombre Sandra. Luego que llegó por una promesa de empleo de “Maritza”, a quien no conocía.
“Mentí para proteger a mis dos hijos”, confesó tras afirmar que la mujer sabía donde vivía su familia.
Alto costo. De acuerdo con el testimonio de las afectadas, se les pagaban 10 euros la noche y 50 céntimos de euro adicionales por cada trago vendido. Recibían diez euros por tener relaciones con un cliente dentro del negocio y 35 euros por tener relaciones con un cliente fuera del cabaret.
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Chipre
La República de Chipre es una isla ubicada en el occidente asiático y que tiene una población estimada en 784,301 habitantes, de acuerdo con un censo de 2007. Su capital es Larnaca y está sobre el mar Mediterráneo, 113 kilómetros al sur de Turquía, 120 kilómetros al oeste de Siria y 150 kilómetros al este de la isla Kastellorizo. Es miembro de la Unión Europea y sus idiomas son griego y turco.
Desde RD a Chipre
Un viaje desde Santo Domingo a Chipre se estima entre RD$122 y 174 mil, dependiendo de la línea aérea. Las rutas son Santo Domingo-París, Francia-Praga, República Checa-Larnaca, Chipre. Otra línea ofrece el viaje Santo Domingo-Madrid-Roma, Italia-Larnaca.
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