De su lado, el ente azucarero estatal dominicano anunció la compra de 32 mil toneladas métricas de azúcar en el mercado internacional para paliar la escasez del dulce que ha propiciado una desenfrenada especulación por parte de los comerciantes.
Esa cantidad forma parte de un total de 60 mil toneladas métricas autorizado por el gobierno para resolver la situación.
La penuria del producto se hizo sentir desde fines de febrero, consecuencia de las compras en el país de grandes cantidades del dulce por organizaciones internacionales y humanitarias para auxiliar a los damnificados por el terremoto que en enero pasado devastó la capital haitiana y zonas adyacentes.
Al aumento de la demanda, los comerciantes respondieron con el acaparamiento y, después, con la elevación descontrolada de los precios, que las autoridades han sido incapaces de yugular.
La situación fue denunciada por el director del Instituto Dominicano del Azúcar, Faustino Jiménez, quien dijo que los comerciantes estaban escondiendo el producto para incrementar sus ganancias de manera ilegal.
Los organismos reguladores oficiales impusieron un precio tope de 16 pesos (0,44 centavos de dólar al cambio del día) por libra, pero los empresarios y comerciantes independientes la desacataron porque aducen que viola la libertad comercial y el mecanismos de oferta y demanda.
Otrora gran productora de azúcar, beneficiada por el inicio del bloqueo comercial y financiero estadounidense contra Cuba, al paso de los años la industria azucarera dominicana disminuyó de manera sustancial su producción debido a la inestabilidad de los precios en el mercado mundial.
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